LLECHA JOFRE, CARLOS / KIKO SEBASTIA COSTA
Los adultos la llaman dislexia, pero lo único que sé es que me molesta cuando tengo que hacer los deberes y ella solo tiene ganas de jugar.
Mientras me peleo con la criatura porque no me deja hacer la redacción, el folio ha empezado a brillar y una voz nos ha invitado a entrar en un mundo fantástico.
¿Encontraremos la forma de colaborar juntos para escribir la redacción que tanto me cuesta hacer?
¿Se puede domesticar realmente a la dislexia?