Desde su publicación, estas memorias han sido el libro de referencia de millones de amantes de la naturaleza. Tiernas, divertidas y embebidas en el ambiente bucólico de la campiña inglesa, son uno de los testimonios escritos más celebrados sobre el amor por los animales, el compañerismo y la vida rural en todo su esplendor.
Cuando el joven James Herriot termina la carrera de veterinaria en Glasgow y acepta su primer trabajo en una pequeña localidad de Yorkshire, no sabe muy bien dónde se está metiendo. Y es que literalmente deberá meterse dentro de una vaca, desnudo de cintura para arriba, en un establo prácticamente a oscuras y a temperaturas glaciares. Esto no lo explicaban sus libros de veterinaria. Ni tampoco que deberá ganarse uno a uno a todos los granjeros de la comarca.
Herriot vuelve a demostrar una profunda empatía, un humor brillante y un auténtico amor por la vida en un libro con el que reír, llorar y deleitarse con los retratos de sus muchos pacientes animales y de sus variopintos dueños.
Ca´lida, alegre y reconfortante. Un canto a la vida.
Un clásico imprescindible.
«Herriot se deleita en la vida, la abraza con sensibilidad y entusiasmo y escribe con gracia. Este es un libro repleto de felicidad.» THE NEW YORK TIMES