Se considera que la idea de familia es algo que da sentido a la vida, pero en la práctica, las familias no siempre se reúnen, ni charlan sobre lo que importa, ni se ríen tanto o tan a menudo como deberían. Todo el mundo está demasiado ocupado, resulta difícil entrar en ciertos temas y, sin que nadie se lo proponga, las ocasiones se van escapando. El Juego de la Familia es la solución; se trata de un juego diseñado para que las reuniones familiares estén a la altura de nuestras mayores expectativas. Consiste en una serie de preguntas (elegidas al azar con un dado) que dan pie a las mejores conversaciones: aquellas con las que volvemos a conectar, decimos cosas que siempre quisimos compartir y recordamos por qué la familia es importante.